El operador postal holandés PostNL PTNL.AS rebajó el lunes su perspectiva de ganancias para 2022 por segunda vez este año, ya que el „alto nivel de inflación sin precedentes” y la presión sobre el gasto de los consumidores afectaron los costos y los volúmenes de comercio electrónico.

A medida que Europa se enfrenta a los crecientes costes laborales y de combustible, los operadores postales se enfrentan a nuevos desafíos derivados de la disminución de los niveles de volumen y la confianza de los consumidores.

„El entorno macroeconómico y geopolítico actual es desafiante y provoca vientos en contra, especialmente para la industria de la logística”, dijo la presidenta ejecutiva, Herna Verhagen, y agregó esta visibilidad limitada sobre el comportamiento del consumidor .

La compañía, que entrega paquetes y cartas en Bélgica, los Países Bajos y Luxemburgo, ahora ve ganancias normalizadas antes de intereses e impuestos (EBIT) para todo el año en un rango de 145 millones a 175 millones de euros ($ 148-178 millones).

En mayo, redujo su guía de ganancias a 170 millones a 210 millones de euros, advirtiendo que 2022 sería más desafiante de lo esperado debido a la alta inflación y los menores volúmenes de comercio electrónico.

Las acciones de la compañía cayeron alrededor de un 3% en las primeras operaciones.